Briconancy: el resurgir de Pili

Estas horribles cejas me trajeron de cabeza desde el primer día y por más que intentaba e intentaba arreglárselas las empeoraba, todo por miedo a no poder quitarlas si utilizaba pintura.

Con esta desesperación y rabia de ver a una muñeca con gran potencial sin poder sacar su belleza a la luz, decidí que sería mi acompañante a la quedada de Madrid del 18 de febrero, con la esperanza de que algún o alguna compi me pudiera arreglar esta guisa.

Allí en Madrid me comentaron que la pintura acrílica se borraba fácilmente y que el rotulador lo que hacía era manchar la goma, que era lo que le había ocurrido. También recibí consejos para repintar los labios.

Tras un mes de capas de benoxigel en las cejas para borrar las manchas del rotulador sin todo el éxito esperado, compré del Mercadona un quitamanchas para tinte y se lo apliqué con un algodoncito. Algo más se disimularon, aunque no se han podido eliminar del todo.

Amalia me comentó que con una moneda de cinco céntimos encajada en el ojito la altura de las cejas quedaba perfecta; pero yo las veía un poco altas y, como soy poco mañosa, al quitar la moneda, se me emborronaba toda la ceja. Probé con la de dos y la altura quedó mucho mejor, aunque me costó bastante hacer una medio decente. La otra cejita la hice a mano y con la uña fui dándoles la misma forma a las dos (en la medida de lo posible, porque no fue nada fácil).

Concha me comentó que el esmalte de uñas para pintar los labios iba fenomenal y, a mi modo de ver, creo que el resultado es estupendo.

Un cambio de ropita, una peinadita y.................

.....este es el resultado.

GRACIAS A TODOS LOS COMPIS QUE ME AYUDASTEIS A ARREGLARLA, SOIS ESTUPENDOS.